Los últimos desencuentros entre el kirchnerismo y la conducción actual de la CGT han generado ríos de tinta en los medios opositores y oficialistas. En ambos casos se ha pretendido mostrar tanto a la Presidenta, como a la referencia de ese sector, el compañero Hugo Moyano, como dos corrientes opuestas, cuyo destino es el desangrarse para llevar a la Argentina a una especie de comedia del año 75. El problema es nuevamente la juventud vs. la burocracia sindical o la democracia vs. las corporaciones. El discurso, por momentos, tiene un lejano aire a desconfianza alfonsinista contra la conducción de la CGT, que a su vez se queja amargamente, a veces, de carecer de posibilidad de diálogo directo con la Presidencia. Pero el problema no es la disputa misma entre los trabajadores y la conducción del movimiento nacional, sino negar que ella existe y que es parte de cualquier movimiento nacional. SOBRE LA EXTORSIÓN, LA DESILUSIÓN Y LA POLÍTICA El discurso de Hugo Moyano en Huracá...
SOCIALISTAS DE LA IZQUIERDA NACIONAL