La Mesa Nacional del Partido Patria y Pueblo - Socialistas de la Izquierda Nacional mantuvo una reunión plenaria los días 30 de noviembre y 1 de diciembre de 2019, con presencia de representantes de todos los distritos en los que el partido tiene desarrollo.
Al término de la reunión, acordaron emitir la siguiente DECLARACIÓN:
El partido Patria y Pueblo-Socialistas de la Izquierda Nacional celebra con el conjunto del Frente de Todos la rotunda victoria popular en primera vuelta de la fórmula integrada por los compañeros peronistas Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner contra el neoliberal antipolítico, enemigo del Estado y representante del imperialismo y la oligarquía Mauricio Macri, y su regiminoso y colaboracionista "peronista blanco" Miguel Ángel Pichetto.
Patria y Pueblo estuvo pregonando la necesidad de unir al campo nacional y popular desde mucho antes de que esta condición del inmenso triunfo que hemos obtenido fuese alcanzada.
Señalamos desde el principio -inicialmente junto a unas pocas voces más- que sólo un haz de máxima amplitud aseguraba derrotar a Macri y sus secuaces. Es que somos socialistas de la izquierda nacional identificados incondicionalmente con la sentencia de Perón de anteponer la patria a cualquier interés de tipo fraccional, por legítimo que sea.
Celebramos doblemente, entonces, que nuestras consideraciones respecto a la concreción de un frente patriótico terminaran siendo un patrimonio de todos.
A medida que avanzaba la demolición nacional macrista, Patria y Pueblo pasó a entender que esa unidad debería constituir un verdadero frente de salvación nacional, que es exactamente lo que ha empezado a ser el Frente de Todos. Por ello que durante las elecciones de agosto y octubre de este año nuestros compañeros se sumaron sin duda alguna al esfuerzo común. En este nuevo panorama nuestro partido se suma, con sus banderas y sus compañeros, a la lucha común por poner a la Argentina de pie.
Nuestro partido señala además la inevitable necesidad de aplastar cualquier intentona retornista de las fuerzas contrarrevolucionarias hoy en acecho. Vemos ahora cómo esos triunfos exacerbaron la pulsión antidemocrática del Pro y sus secuaces.
Las presiones, operaciones y amenazas de los sectores que más se enriquecieron durante el cuatrienio sórdido confirman lateralmente que Macri ha tomado en cuenta los resultados del neoliberalismo en la Argentina, pero más aún la subsecuenta inestabilización de Chile, Ecuador y Colombia, que están en llamas, o de Bolivia, donde sus racistas conmilitones no logran reconocimiento del conjunto de las naciones para su régimen de facto, tan parecido al de 1955 en la Argentina.
Su rumbo, en consecuencia, se torna cada vez más antidemocrático. Parece calcado de la famosa confesión antidemocrática de Milton Friedman en 1988: "Creo que una economía relativamente libre es una condición necesaria para la libertad. Pero hay pruebas de que una sociedad democrática, una vez establecida, destruye una economía libre".
Defender a la democracia contra los neoliberales es defender la democracia contra el destructivo "mercado libre" dominado por monopolios. Pasa por seguir ampliando el arco de apoyos del nuevo gobierno, otorgándole especial importancia al movimiento obrero, los movimientos sociales y los sectores más bajos de nuestra pirámide social.
Son ellos los más interesados en terminar con la hegemonía financiera y expoliadora del sector especulativo en la economía argentina, sin la cual no habrá reconstrucción nacional duradera: nada pueden perder más que la Patria, porque el resto les ha sido expropiado sin piedad en los últimos cuatro años.
Necesitamos, de una buena vez, poner a la Nación por encima del mercado, defender a la política y el bien común de las agresiones de la antipolítica y la codicia corporativa. Dentro de ese proyecto habrá un lugar destacado para las Fuerzas Armadas: si la defensa de la política no se conjuga con una política de defensa, fracasa.
Una puerta nueva se abre también ante las FFAA: el redespliegue en función de recuperación integral de la soberanía sobre nuestro territorio, y una nueva formación regida por ese principio geopolítico. Recuperarán así el mandato browniano y sanmartiniano de su origen popular y destino nacional. Y con ello el amor del pueblo al que, en vez de despreciar, reprimir o temer, tendrán el alto honor de defender, ofrendando en ello la vida si es necesario.
Lo mismo cabe decir de las fuerzas de seguridad e indudablemente, de la administración de justicia, bastardeada y degradada en particular esta última hasta límites que ni siquiera se vieron bajo los regímenes de facto que asolaron el país entre 1955 y 1983.
Sobre esos cimientos podremos iniciar la tantas veces frustrada recuperación, esta vez definitiva, del poder del Estado para el pueblo argentino, y no para las microscópicas y parasitarias minorías oligárquicas y sus socios y aliados imperialistas.
Mesa Nacional
Néstor Gorojovsky - Secretario General
Bailón Gerez - Aurelio Argañaraz - Laura Gastaldi - Rubén Rosmarino - Pablo López - Hugo Santos - Jacinto Paz - Lorena Vazquez - Gastón González - Juan Maria Escobar
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