Patria y Pueblo felicita a Nicolás Maduro por su impecable victoria electoral en la Patria de Simón Bolívar y Hugo Chávez y denuncia que detrás de la conflictividad social desatada a partir de la difusión de los resultados del comicio se mueven las más oscuras fuerzas del imperialismo estadounidense sostenidas por sus agentes locales.
El triunfo de Maduro, mas allá de los porcentajes, refleja el voto de una mayoría que apuesta a la continuidad del Socialismo del Siglo XXI y a la profundización de la misma con el Programa de la Patria, plataforma electoral que plantea los pasos a seguir en el período 2013-2019.
No debemos olvidar que la revolución bolivariana aceptó con tranquilidad el resultado adverso cuando fue derrotada en un referéndum crucial por menos del 2% de los votos. Hoy, Capriles y sus mandantes ocultos con sede en Miami y Washington no aceptan una clara derrota en el sistema electoral más trasparente del hemisferio occidental.
Los hechos de vandalismo y violencia registrados en la noche de ayer en Caracas y alrededores con el saldo de 7 muertos y el silencio de la oposición, el desabastecimiento de productos básicos en los días previos a las elecciones, la gritería de medios opositores que, sin prueba alguna, gritan "fraude, fraude" en todos los idiomas, y el desconocimiento del resultado electoral por parte de Capriles son indicios claros de que se busca derrocar al gobierno constitucional de Nicolás Maduro.
Bien saben los partidarios de Capriles de fraudes, ya que justamente en Miami y Washington se pergenio aquella elección escandalosa que le aseguró la presidencia a George W. Bush con la intervención salvadora y milagrosa de su hermano Jeb en el estado de la Florida. También debería recordar el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que preside un sistema político tan corrompido que llegó a institucionalizar la figura del influyente y gestor de favores ante el poder, al que denomina "lobbysta".
El imperialismo estadounidense intenta reiterar en Venezuela la pantomima siniestra que probó en varios sitios durante la gélida "primavera árabe", para luego generar un escenario similar al de Siria o darle cobertura moral a un magnicidio, como el que sufrieron Muammar Gaddafi, Yasser Arafat o, según muchos, el propio Hugo Chávez.
El ataque al gobierno de Maduro es un ataque a todos los gobiernos nacionales, populares y democráticos de América Latina. Sin ir demasiado lejos, se puede ver cómo actúan de modo idéntico en la Argentina para desestabilizar al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
Patria y Pueblo insta a un inmediato respaldo irrestricto al gobierno de Nicolás Maduro por parte de la UNASUR y la CELAC, ya que allí se juega el destino de la marcha hacia la democratización y liberación de América Latina. Es momento de defendernos activamente contra cada ataque que el imperialismo y las oligarquías locales intentan contra nuestros gobiernos.
MESA NACIONAL
El triunfo de Maduro, mas allá de los porcentajes, refleja el voto de una mayoría que apuesta a la continuidad del Socialismo del Siglo XXI y a la profundización de la misma con el Programa de la Patria, plataforma electoral que plantea los pasos a seguir en el período 2013-2019.
No debemos olvidar que la revolución bolivariana aceptó con tranquilidad el resultado adverso cuando fue derrotada en un referéndum crucial por menos del 2% de los votos. Hoy, Capriles y sus mandantes ocultos con sede en Miami y Washington no aceptan una clara derrota en el sistema electoral más trasparente del hemisferio occidental.
Los hechos de vandalismo y violencia registrados en la noche de ayer en Caracas y alrededores con el saldo de 7 muertos y el silencio de la oposición, el desabastecimiento de productos básicos en los días previos a las elecciones, la gritería de medios opositores que, sin prueba alguna, gritan "fraude, fraude" en todos los idiomas, y el desconocimiento del resultado electoral por parte de Capriles son indicios claros de que se busca derrocar al gobierno constitucional de Nicolás Maduro.
Bien saben los partidarios de Capriles de fraudes, ya que justamente en Miami y Washington se pergenio aquella elección escandalosa que le aseguró la presidencia a George W. Bush con la intervención salvadora y milagrosa de su hermano Jeb en el estado de la Florida. También debería recordar el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que preside un sistema político tan corrompido que llegó a institucionalizar la figura del influyente y gestor de favores ante el poder, al que denomina "lobbysta".
El imperialismo estadounidense intenta reiterar en Venezuela la pantomima siniestra que probó en varios sitios durante la gélida "primavera árabe", para luego generar un escenario similar al de Siria o darle cobertura moral a un magnicidio, como el que sufrieron Muammar Gaddafi, Yasser Arafat o, según muchos, el propio Hugo Chávez.
El ataque al gobierno de Maduro es un ataque a todos los gobiernos nacionales, populares y democráticos de América Latina. Sin ir demasiado lejos, se puede ver cómo actúan de modo idéntico en la Argentina para desestabilizar al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
Patria y Pueblo insta a un inmediato respaldo irrestricto al gobierno de Nicolás Maduro por parte de la UNASUR y la CELAC, ya que allí se juega el destino de la marcha hacia la democratización y liberación de América Latina. Es momento de defendernos activamente contra cada ataque que el imperialismo y las oligarquías locales intentan contra nuestros gobiernos.
MESA NACIONAL
Néstor Gorojovsky, Secretario General
Bailón Jerez, Juan María Escobar, Rubén Rosmarino, Lorena Vazquez, Hugo Santos, Gustavo Battistoni, Pablo López, Silvio Zuzulich, Edgardo Sánchez, Jacinto Paz
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